Bueno, pues por fin he podido verla. Dos años después de ver Deadpool , he podido disfrutar de esta segunda parte. Sí, habéis leído bien, disfrutar. No todo va ha ser Thor & Cia...
Wade Wilson (Ryan Reynolds), tiene la misión de salvar a un chico llamado Russell (Julian
Dennison) de las manos de un poderoso rival llamado Cable (Josh Brolin).
En aras de dar cumplimiento a su tarea el antihéroe formará un grupo al
cual pondrá el nombre de X-Force, y que X-MEN le parece que no tiene en cuenta a las mujeres.
Siempre he dicho que una película debe contar una historia, y si es buena mejor. Aquí nos enfrentamos a una historia muy poco original y... funciona. ¿Por qué? La respuesta es el increíble personaje que ha recreado Ryan Reynolds .
La película es una sucesión de escenas espectaculares de lucha y... de comedia. No deja títere con cabeza y las alusiones a otras películas es constante. Incluso a él mismo cuando vemos como firma un autógrafo como "Ryan Reynolds". Y hay más, porque es capaz de meterse con la propia película al acusar a los guionistas de poco imaginativos e incluso hablar que por "culpa del bajo presupuesto no puede salir ningún X-Men de los importantes"
Poco más se puede decir, como todas las películas de superhéroes, sabemos que vamos a ver, pero esta vez, el añadido es un descarado, mal hablado y poco correcto protagonista.
Para mi gusto y humilde opinión, esta secuela es superior a la primera con un personaje principal en constante movimiento dialéctico lo que me hace recordar al gran Groucho. Hubiera sido un buen Deadpool.