martes, 16 de agosto de 2016

Objetivo Londres

Bueno, pues como ya se puede ver en la carátula en donde el bueno de Gerald está con la pose de "¿Qué pasa? Que te meto..." estamos ante una película en donde lo verdaderamente original es... es... espera.. ¡Ah sí! que no pasa en USA, aunque no quita que los protas sean americanos con la testosterona de las barras y las estrellas hasta arriba.

Tras el fallecimiento del primer ministro británico en extrañas circunstancias, todos los líderes mundiales se reúnen para su funeral en Londres. Pero existen planes para que el acto, que cuenta con la mayor seguridad del planeta, sea una oportunidad para acabar con los mandatarios y sembrar el caos en todo el mundo. El presidente de los Estados Unidos y sus colaboradores del Servicio Secreto son los únicos capaces de evitar la tragedia.

Bien, al final de la sinopsis ya he desvelado quien serán los encargados de salvar al mundo por enésima vez.

Es todo muy repetitivo con su precuela (Objetivo la Casa Blanca) y lo único que ofrece es tiros y acción a raudales. Incluso tenemos al agente Mike (Gerald Butler) pensando en dejarlo de nuevo, esta vez porque va a ser papá.

Los actores no pueden hacer más ante un guión coral que en ciertos momentos se salva por al cantidad de acción que hay y que no te deja pensar. Por cierto, me reí bastante cuando todos están esperando al Presidente de la República Francesa, y este está... bueno dejo que lo veáis vosotros.

No hay mucho más que decir. Si te gustó la primera, esta te gustará más, pues la acción es un no parar y la casi destrucción virtual de Londres está muy lograda. Por lo demás, todo falla. Ninguna trama que intenta tocar el tema emocional funciona, casi te da igual que esté a punto de ser papá, al final lo único que quieres es que sigua disparando. Te da un poco igual que "X" muera porque nunca empatizas con nadie.

Una secuela  perfectamente prescindible en donde podrás encontrar todos los tópicos de este tipo de películas, desde las bromitas de macho alfa hasta las frases clichés. Eso sí, como es una película de acción y la hay, no puedo calificarla como mala, pero avisado estás de que no busques nada más.


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