Me va a costar mucho dar mi opinión sobre esta película, por muchas razones, pero... Todo sea por teneros al día con las últimas novedades, y que haya para todos los gustos y estilos.
Yo reconozco que nunca he sido fan de los grandes robots, lo siento, no les encuentro encanto. Dicho esto, lo primero que se me viene a la mente es... Michael Bay ¿Por quéeeeeeeeeee? Imagináos estos arrodillados en el suelo y gritándolo al cielo, y entenderéis el concepto de lo que siento.
A ver, entiendo que hay que sacar dólares, que hay que estirar al máximo la saga porque es lo suyo, pero al menos, ¿que se lo trabajen un poco, no? Parece que hoy en día con ponernos explosiones, tortas como panes, y grandes efectos especiales ya vale. Pues no, oiga.
Ante la quinta entrega de los robotitos, sólo se les ha ocurrido hacer un mejunje y pillar todo lo que han podido de las anteriores. Reciclan personajes, reciclan argumentos, hacen guiños a otras películas, y por si faltaba algo, pensaron en añadirle una parte "histórica", los transformes en la Edad Media, yeah.
Han incluso conseguido que el gran Anthony Hopkins participe en ella, en la verdad un papel que al menos es cachondo. Pero en la base, lo mismo de siempre, la humanidad quiere evitar su destrucción, y los autobots son nuestra única esperanza porque siempre lo han sido, desde tiempos inmemoriales. Unidos a Mark Walhberg, y a una guapísima e inteligentisima historiadora y filósofa, con máster y doctorado (que es que yo alucino con lo rebuscado del personaje), tendrán que enfrentarse ambas facciones.
Todo ello durante el corto espacio de tiempo de más de 2 horas y media. Desde mi punto de vista, sólo apta para aquellos súper fanáticos de robots gigantes, sin más.
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