lunes, 23 de octubre de 2017

Señor, dame paciencia

El cine español lleva ya unos años en los que me da menos miedo de ver que antes. Quitando algunos truños inombrables, en general me he llevado buenas sorpresas. No me da ningún tipo de reparo decir que vi esta película por Jordi Sanchez, porque el resto... no me daba buena espina.

Cuando la mujer de Gregorio (Jordi Sanchez), un banquero muy conservador tirando a fachín, del Real Madrid y muy gruñón, fallece en un accidente, éste se ve obligado a cumplir su última voluntad: pasar un fin de semana con sus hijos y sus respectivas parejas en Sanlúcar de Barrameda para esparcir sus cenizas en el Guadalquivir. Aquí es donde empiezan los problemas para Gregorio, ya que su hija Sandra (Megan Montaner) está casada con Jordi (David Guapo), un catalán muy culé al que no soporta. Su otra hija, Alicia (Silvia Alonso), está saliendo con Leo (Salva Reina), un hippy anti-sistema al que tampoco puede ni ver, y Carlos (Eduardo Casanova), su hijo pequeño, con el que lleva seis meses sin hablarse desde que salió del armario, se presenta con su novio Eneko ( Boré Buika), un vasco de origen senegalés. Este viaje multicultural pondrá a prueba la tolerancia y la capacidad de perdonar de una familia tan disfuncional como cualquier otra, en el que tendrán que aprender a aceptarse los unos a los otros, con sus virtudes y defectos.

La tremenda ensalada está servida con todo tipo de ingredientes dispares y en donde encontrar el conflicto no es difícil. ¿Entonces por qué parece que no despega nunca? 

La película la dividiría en dos partes. El primer ochenta porciento de la misma, es una comedia al uso, con sus conflictos de intereses y algún que otro chistecillo o situación divertida. Eso sí, todo recae en Jordi Sanchez del que durante toda la cinta se espera sus comentarios. Pero mira por donde aparece Salva Reina y con ese papel de Hippy suma mucho a la parte cómica. Y es que a mi parecer, le gana "el partido" al otro cómico del reparto, David Guapo, que si bien está correcto, no es creíble.

La segunda parte, que es el final, prácticamente nos olvidamos de la comedia y entramos en un territorio lacrimógeno. Es el momento de esparcir las cenizas y la familia o se une o se separa definitivamente. Es el momento. El contraste de comedia con este último es muy pronunciado. A muchos les gustará y a otros les parecerá que pierde el norte. A mi, me gustó.

La resumiría como una comedia correcta, que te arrancará sonrisas que no carcajadas y servirá para animarte si estás un poco bajo.

PREMIOS
2017: Festival de Málaga: Sección Oficial Largometrajes (Fuera de concurso)

 


domingo, 22 de octubre de 2017

Annabelle: Creation

Una nueva "franquicia" más, extraída a raíz de Expediente Warren, en este caso, intentando darnos más información sobre la muñeca diabólica, Annabelle Creation. Sus orígenes, como se convirtió en ese ente que aterrorizó a generaciones (juas), hasta que llegó a manos del matrimonio Warren.

Lo cierto es que con Expediente Warren sí que vi la posibilidad de una extensión en varias películas, a modo de "casos" en los que hubiera participado el matrimonio, con el morbo añadido que son historias basadas en los hechos ocurridos a la pareja.

Y he de decir, que con el tema de Annabelle no lo veo, no. La primera ya me pareció bastante ridícula, empezando por el cambio de la muñeca para que diese más miedito, porque la original la verdad es que parecía cosa de chufla. 


Con esta, pese a que la época me atraía más, durante los años 40-50,  y está muy bien ambientada, no me provoca lo que me tiene que provocar, canguelo. Es decir, a priori pinta bien, unos padres afligidos tras la muerte de su pequeña, se recluyen en su casa en medio del secarral, y para intentar paliar su trauma, al cabo de los años, traen a un grupo de niñas huérfanas acompañadas de una monja, para que les sirva de residencia mientras encuentran familia. Y en todo ese mejunje se esconde el oscuro secreto de una muñeca poseída por un ente maliggggno, que ve ahí su caldo de cultivo bueno.


Pero que no, que no me llega, y no tiene nada que ver con que sea muy previsible. Si algo adoro de las películas de posesiones o espíritus (las que más yuyu me dan), es que nos metan los clichés básicos de este tipo de películas, los disfrutas. En este caso, en Annabelle creation parece que una vez más, buscan una excusa con la que poder sacar unos dólares más, supuestamente para explicarnos de donde procede la muñeca y su maldad; pero está todo muy cogido con pinzas, la procedencia, los personajes, la absurdez con la que se comportan... No sé la historia real irá por ahí o se habrán tomado mil y una licencias. Yo sólo sé que si os gusta el cine de terror, no creo que os impresione demasiado.

 


miércoles, 18 de octubre de 2017

Nosotros en la noche




La reunión de estos dos actores después de muchos años, estrenada por Netflix y presentada en el Festival de Venecia, con toda la controversia que la presentación de películas de plataformas privadas suscitó.

Se dice que siempre han tenido mucha química, y creo que esta es la cuarta o quinta película en la que colaboran, y había mucha gente que tenía ganas de verlos.

Se trata de un drama romántico en la edad madura. Mucho más dulce que por ejemplo Los puentes de Madison, realmente es una película donde "no pasa nada", es como si durante unos días te dejasen mirar por un agujerito la vidas de dos personas anónimas, como si fueras uno de los ángeles de El cielo sobre Berlín.

Robert y Jane son dos vecinos, viudos desde hace años, y que prácticamente tienen contacto hasta que un buen día, ella le hace una propuesta: están solos, echan de menos tener compañía, ¿por qué no vienes por las noches a dormir a casa? Previamente nos muestran su solitaria vida, sus rutinas, lo que les cuesta dormir por la noche... empatizas enseguida con ellos. Porque al fin y al cabo, somos seres sociales, necesitamos a los demás, estar con alguien a nuestro lado, contar con alguien.


Como siempre digo, el título original me parece más adecuado: Nuestras almas por la noche. Cada noche se reúnen, charlan y se van conociendo, y poco a poco se acercan más. En cuanto a las interpretaciones me enamoré del papel de Robert Redford, a ella la veo correcta, pero como está tan recauchutada cuesta adivinar las expresiones de su cara.

Para mí no es un gran peliculón, pero tiene momentos muy buenos, conversaciones que te llegan, y de vez en cuando apetece ver una película plácida, realista, y que pese a todo, da un poco de esperanza. Os la recomiendo.




martes, 17 de octubre de 2017

Duelo de hermanos: la historia de Adidas y Puma

     Estamos ante una película cuyo mercado fue la TV, pero me parecía interesante de contar. Reconozco que m decisión de verla venía condicionada por un documental donde contaban la historia y en donde descubrí (quizá fui el último en enterarse) que los fundadores de Adidas y Puma eran hermanos.

     En los años 20 los hermanos Adolf y Rudolf Dassler empiezan a manufacturar zapatillas de deporte. Adolf es un artesano con mucho talento, meticuloso y soñador mientras que Rudolf es la mente más económica, materialista y mujeriego. Al comienzo de la Segunda Guerra Mundial las relaciones entre ellos ya no son buenas, pero a su término, la relación entre los hermanos se deteriorará hasta tal punto de convertirse en rivales. 

     La película, como su título indica, es biográfica, pero ya al principio de la misma te avisan, que si bien el contexto es histórico, la película es ficción, sobretodo en lo que la relación entre hermanos se refiere. Sí. A mi también me dio el bajón. ¿Qué sentido tiene hacer una película histórica de ficción? Ninguno.

     A medida que la película avanzaba, intentaba recordar el documental y me gustaba que no se separa tanto uno del otro. Seguramente, donde más licencias se hayan tomado haya sido con los personajes y en sus tramas. Aún así, me pareció una película muy interesante, porque si bien, puede que no sea un reflejo exacto de la realidad, si muestra como pudo haber sido.

La realización técnica es muy buena. Hay recreaciones muy bien elaboradas que están a la altura de algunas series de éxito e incluso supera a algunas. Los actores y actrices, de los que desconozco prácticamente todo, me parecen correctos y creíbles.

No he podido encontrar un tráiler decente, así que os pongo la "promo" que hizo el canal 13 cuando la puso. Es interesante y nada aburrida.

sábado, 14 de octubre de 2017

Noche de venganza

La presencia de Jamie Foxx fue la que me animó a ver esta película. Además, las "premisas" que requiere el desarrollo me pareció más que interesante. Jamie es capaz de hacer muy buenas películas aunque su inexpresividad a veces le puede pasar factura. Pero dado el tipo de película a la que nos enfrentamos, creo que tiene posibilidades.

Vincent Downs (Jamie Fox) es un agente que se encuentra en medio de una tormenta repleta de policías corruptos implicados con el control de un casino y mafiosos dispuestos a cualquier cosa. Cuando un atraco sale mal, un grupo de criminales secuestra al hijo adolescente de Vincent. En sólo una noche, él debe salvar a su hijo, evadir una investigación interna de la propia policía y llevar a los secuestradores ante la justicia... 

Como buena película policíaca tiene acción, no se le puede negar eso, aunque la trama... se mantiene con pinzas. La simpleza del guión intenta ser compensada con algunas sorpresas, aunque la mayoría de ellas son previsibles.

Sinceramente, nunca llega a ese nivel de implicación espectador-historia como para que te sientas mínimamente nervioso o metido en la película. Con esto, no quiero decir que sea mala, pero le falta "algo" para transmitir. Y no, no es la falta de inexpresión de Jamie Foxx el cual está correcto. 

Toda la película gira a la persecución ente todas las partes implicadas, policía, asuntos internos, mafiosos, traficantes. Todos buscándose y todo pendiente de un hilo.

¿Qué más se puede decir? Poca cosa. Acción hay, giros en las tramas hay... tiene todos los ingredientes para ser una buena película... pero me da la sensación de que no la es.

Puede ponértela para cenar o una tarde aburrida donde quieras algo de acción, tampoco te arrepentirás.

viernes, 13 de octubre de 2017

Blade Runner 2049

Decir que este era un estreno esperado es poco. Y eso que yo no soy una gran fan de Blade Runner, aunque reconozco que marcó una época, un estilo, una forma de hacer cine, y sobre todo en ese género.

Estamos en la California de 2049, 30 años después de lo ocurrido en la película original, los replicantes ya no son los temidos seres que intentaban quitarnos la humanidad; sino que han sido renovados técnicamente para servirnos y complacernos. Uno de esos replicantes es K (Ryan Gosling), que trabaja para la polícia como blade runner, persiguiendo y eliminando a los antiguos replicantes de la revuelta.

Esa es la premisa de la película, que obviamente desembocará en una trama más compleja, en la que además conectaremos con la primera película, que nos hará entender muchas de las cosas que pasaron en aquel momento, no os contaré más.

Leí bastantes críticas antes de verla, cosa que siempre digo que no voy a hacer y pocas veces consigo. Y es cierto que me generaron muchas expectativas, por lo espectacular que la vendían, porque recuperaban al bueno de Harrison, por Ryan Gosling, por la curiosidad de ver a Ana de Armas en una superproducción...


El resultado para mí, ha sido una experiencia más de forma que de fondo. Es decir, si algo tenía la primera, es que a pesar de que no te gustara la atmósfera opresiva de ese futuro horrible, tenía una gran carga de sentimiento, de transmitir esa lucha de los replicantes por existir, por ser, ese planteamiento moral, cosa que además casaba con ese ambiente. Y eso es precisamente lo que le falta a esta, transmitir emociones.

Es espectacularmente bella, una estética perfecta, unos colores, una técnica... por no hablar de la música, con el gran Hans Zimmer que nunca falla. Pero el argumento ni se acerca a la de la primera, y eso que parece que intentan repetir la fórmula, con un nuevo giro de tuerca en el tema de los replicantes. Todo ese envoltorio frío de un futuro desolador sin estar mezclado con sensaciones, se queda en eso, en un bloque de hielo, bonito, nada más.

Así que, que os puedo decir, si la véis la disfrutaréis, pero no como la primera, me parece buena, pero le falta para llegar a ser la obra maestra que muchos nos dicen.