Me propuse verla sin demasiadas ganas, la verdad. Hacía poco que había visto El Aprendiz de Brujo y estaba un poco saturado de tanta bruja y demás. Pero había que verla ¿no?
Un cazador de brujas del pasado es condenado a vagar inmortal por la tierra para que sufra eternamente el dolor de la pérdida de sus seres queridos.
Es complicado comentar esta película. Por un lado tenemos a un Vin Diesel guerrero, que bien podría haber sido uno de los enanos de El Hobbit, que logra matar a la madre de todas las brujas, pero esta le maldice con la vida eterna... Esta primera parte me gusta, guerreros, magia... pero de pronto... estamos en un avión. Aquí nos presentan de verdad al personaje... mago habilidoso y ligón empedernido que logra llevarse a su casa a una azafata en un chasquear los dedos.
La Orden de la cruz y el hacha consta de Vin Diesel dando caza y de un miembro de la iglesia que le ayuda, este es Michael Caine. Sinceramente, la pareja no tiene feeling ninguno. El caso es que Michael Caine se jubila y le hace una última visita para decírselo y para anunciarle que pronto conocerá a su sucesor. Y Sorpresón, el nuevo ayudante es Elijah Wood. Pasamos de feeling 0 a feeling -10. Sin contar con que su personaje es totalmente prescindible.
Los chascarrillos y bromas son insuficientes siquiera para arrancar una sonrisa. Vin, en el papel de Vin me pareció que en algunos momentos cogería un cochazo y empezaría a derrapar y que la película cambiara de título por el de Fast & Witch.
Hay una escena, que se ve en el tráiler, donde unas modelos se están maquillando mirándose al espejo, pero este les devuelve la imagen de su verdadero aspecto, mucho más... desfigurado. Y yo me pregunto... ¿Cómo haces para maquillar una cara que no ves?. En fin.
Como he dicho al principio es complicado hablar de esta película pero si queréis verla os aviso que se queda a mitad de camino de todo.
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