miércoles, 3 de febrero de 2016

Enemigo a las puertas

Sin duda impactante, dura y cruel. Así la recordaba y así la siento una vez que la he vuelto a ver. Para mí ya es un clásico de las películas bélicas y en concreto de la Segunda Guerra Mundial. Además de una de mis favoritas.

En 1942 Alemania tiene casi conquistada la ciudad de Stalingrado. No es una ciudad más, pues lleva el nombre de Stalin, así que perderla no es una opción. Vassili Zaitsev, francotirador ruso, hace estragos entre los oficiales alemanes. La propaganda soviética aprovecha la fama de Vassili para convertirlo en un héroe nacional y así sirva de ejemplo a los soldados rusos. Los alemanes, para intentar darle caza, traen o su mejor francotirador, el mayor König.

 La película es una adaptación de la novela escrita por William Craig, basada en un hecho real. En ella relata el enfrentamiento entre el francotirador soviético, Vassili Záitsev, y otro alemán, el Mayor König, durante la batalla de Stalingrado. Generalmente, las adaptaciones me dan miedo, pues el libro suele ser mucho mejor que la película, pero aunque reconozco que no he leído el libro, la película me parece grandiosa, así que si el libro es mejor, habrá que leerlo.

Las escenas iniciales, sobre todo el ataque aéreo es una obra maestra digna sucesora de la de Salvar al Soldado Ryan. La crueldad, no reñida con la realidad, de algunas escenas son como mínimo para quedarse clavado al sillón. Por ejemplo, el momento en el que lanzan a las tropas rusas al ataque y ante la matanza algunos se dan la vuelta siendo ejecutados inmediatamente. La retirada no es una opción y se paga con la muerte.

La ambientación es extraordianaria, con unos decorados muy buenos y un uso de los colores perfecto. Puedes creerte que están en el centro de Stalingrado. Llenar las calles de cadáveres da una idea de lo que aquello pudo ser.

Los actores acertados, aunque a veces Jude Law me parece un tanto inexpresivo, pero el resto del reparto me parece más que acertado. Quiero hacer una especial reseña a Ed Harris que en el cartel de la película me parece un tanto marginado. Su papel como el mayor König es genial. También nombrar a otro actor poco valorado en la película y en general, Ron Perlman, ese actor que sin hacer ruido siempre pone su toque en cada película.

¿Y qué decir de la BSO? Una tonadilla que se mete en la cabeza y aunque no quieras, te transmite todo el dolor que estás viendo.Acertadísima y muy buena.

Como última cosa, dejo la gran línea de diálogo de Vassili cuando coge su arma y apunta...

"Soy una piedra. No muevo ni un músculo. Lentamente me pongo nieve en la boca, para que él no vea mi aliento. Me tomo mi tiempo, dejo que se acerque. Sólo tengo una bala.. Apunto a sus ojos y suavemente mi dedo presiona el gatillo. Mi pulso no tiembla, no tengo miedo"


2001: Premios del Cine Europeo: 3 nominaciones Premio del Público


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