Cuando llevas muchos años sin ver una película que te resultó especial en tu niñez, te entra muuuuucho miedito... El otro día, por casualidad alguien me propuso verla y fue un acierto.
Al ser del 85 y de ciencia ficción una podría pensar que habría perdido mucho, pero nOoOoOoO.
La historia empieza ya en plena acción, el espacio, y unas naves de humanos luchando contra naves de los "dracs", una especie que como véis en el poster de la película, queda definida con su nombre (estos humanos... siempre igual).
Hay un accidente, porque Dennis Quaid (uno de los protas de la película), en este caso el humano, es un ansia viva, y tiene un odio corrosivo hacia los dracs. Total, que acaban tirados en un planeta perdido en que sólo hay pedrulos y alguna charca verdosa cada X kilómetros.
El drac, interpretado por un irreconocible Louise Gosset Jr. y él, tras unos primeros intentos de fulminarse el uno al otro, comprenden que para poder sobrevivir en ese "ecosistema", (en el que la vida se limita a una especie de trilobites terrestres), necesitan ayudarse. Así que acaban conviviendo, aprendiendo el idioma el uno del otro, y tolerándose, hasta forjar una amistad.
La película es sencilla, porque transcurre en su mayoría en el planeta, pero para ser de esa época está bastante bien hecha y conseguida, es una historia de amistad, que intenta reflejar la absurdez de odiar a otro sólo por ser distinto. Para mí tiene buenas escenas y un poco de todo, acción, dosis de humor, ternura... Bastante recomendable, y me trae buenos recuerdos, os la recomiendo, ha envejecido muy bien.
La banda sonora creo que le va como anillo al dedo, realizada por Maurice Jarre, dándole tensión, ternura, dentro de ese ambiente espacial.
Como curiosidad deciros que está basada en una novela corta de ciencia ficción que ganó varios premios, aunque llevada al cine por lo visto fue un desastre de taquilla quizás había demasiado de ese estilo en la época y se pedía mucho, pero a mí me parece buena.
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