Bueno, pues parece que Mel Gibson aún está en forma (muy en forma) y reaparece a los 61 años y siendo padre recientemente con una película en donde se mezcla la droga, el dinero y el intento de tener una vida.
Lydia, una joven de 16 años, es acusada de haber robado una fortuna a un
cartel, pero en realidad es una trampa fraguada por su novio
traficante. La chica tiene que escapar con el único aliado que tiene en
el mundo: su padre, John Link, un eterno fracasado, antiguo motero
rebelde y ex presidiario, que se verá en la obligación de vincularse
nuevamente con un pasado del que huía para poder salvarla a ella.
Nos encontramos ante la típica película de personaje que ha abandonado el mal camino e intenta reconducir su vida. Para cuando lo consigue, algo, en este caso su hija, aparece y lo vuelve a sumergir en un mundo de delincuencia. El planteamiento no es original y su desarrollo tampoco es muy novedoso. Quizá la película pierde muchos puntos en el camino hasta su final, en el que quizá salva el partido.
Quizá voy a decir algo que puede crearme enemigos. La película es entretenida, pero Mel gibson cada vez me gusta menos. Sus gestos melodramáticos y sus momentos ñoños son totalmente inverosímiles. Eso sí, dale una pistola y te lo crees todo. Es un actor de acción y punto. Otro asunto es su capacidad para dirigir, oficio que desarrolla, para mi gusto, de excelente manera.
El papel de Lydia, recae en la actriz casi desconocida
Erin Moriarty. Su cara igual os es familiar pero es ahora cuando parece que su carrera despega. A pesar de tener 22 años, su físico de adolescente le valió para hacer esta película. La cual le servirá de trampolín pues tiene una actuación muy buena llena de matices.
Y para el malo mejicano que mejor que un mejicano de verdad. Diego Luna, al que pudimos ver recientemente en Rogue One, hace el contrapunto de Mel y lo borda.
Y la eterna pregunta. ¿La aconsejaría? Bueno, si el género te gusta le encontrarás muchas cosas buenas, droga, tiros, moteros, cárceles... Tampoco busques minutos y minutos de acción y balas volando. Es una buena película pero creo que aspiraba a más.
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