cine & cine: Salvar al soldado Ryan

Hace poco escribí un post hablando sobre La Chaqueta Metálica y en el decía que era una obra maestra. Para describir Salvar al soldado Rayan tendría que decir lo mismo. Si la primera fue la guinda de los ochenta en cuanto a películas bélicas se refiere, la segunda, no sólo fue la guinda de los noventa, sino que aún no ha aparecido ninguna que le pueda quitar el trono.

Tras el desembarco de Normandía, un pelotón es enviado a buscar a James Ryan (Matt Damon) ya que sus tres hermanos han muerto y el ejército quiere que vuelva a casa. Lo único que se sabe de él, es que fue lanzado en paracaídas tras las líneas enemigas.

Al igual que su "hermana ochentera", Salvar al soldado Ryan está dividida en dos partes, el desembarco y la búsqueda de James Ryan.

Pocas cosas se pueden decir de la primera parte. Sencillamente, impecable. El desembarco en la playa de Omaha es de una crudeza y realismo sin precedente. Se rodó en una playa irlandesa, costó la friolera de once millones de dólares y participaron tres mil extras y más de una veintena de personas con amputaciones reales para representar las mutilaciones de la secuencia. Se tardó un mes en rodarla por completo y para más realismo, en posproducción rebajó un 60% el color para lograr esos tonos marrones, ocres y verdes que vemos en la película. Además, en esta primera parte de la película, se prescinde de la música dejando que podamos oír en su crudeza tantos los gritos como el ruido de los disparos y explosiones. Estos ruidos, fueron grabados de armas reales. Todo esto llevó a que a Spielberg le llovieron los elogios por la perfección en el resultado, pero muchos veteranos necesitaron ayuda psicológica tras ver la película.

Otra de las cosas que hizo Spielberg fue llevar a los actores a un campamento militar para que aprendieran a parecer soldados. Todos menos Matt Damon y Jeremy Davies (Upham). La razón era que fuera mucho más creíble el enfado con estos dos personajes ya que el librarse de tan dura prueba hizo crecer cierto resentimiento hacia ellos entre los demás actores. Y es que el entrenamiento fue tan duro que incluso todos llegaron a votar a favor de que se acortara el periodo de campamento. todos menos Tom Hanks. Su voto pesó más que los demás y no hubo rebaja de días.

Seguramente ya has visto la película, así que es absurdo que te incite a verla, pero es tan buena, que su revisionado no te dejará impasible.